Monseñor Julius Adelakun, obispo emérito de la diócesis católica de Oyo, regresó a su Creador a los 91 años. Según la Historia de las Hijas del Espíritu Santo en Nigeria, fue monseñor Adelakun quien, gracias a su atención a las inspiraciones del Espíritu Santo, expresó el deseo de que la Congregación se implantara en Nigeria: esto se remonta al año 1987.
Monseñor Julius Babatunde Adelakun nació el 4 de noviembre de 1934 en Onigambari, estado de Ogun, Nigeria. Estudió en el Seminario de los Santos Pedro y Pablo de Ibadan, fue ordenado sacerdote católico el 27 de junio de 1965 y obispo el 11 de febrero de 1973 a la edad de 38 años.
Después de su instalación como obispo de la diócesis de Old Oyo, animó a las primeras Hijas del Espíritu Santo (misioneras) en Nigeria a formar, antes de regresar a su país, herederas nigerianas. El gran número de Hijas del Espíritu Santo nigerianas de hoy nace, pues, de su humilde llamada:
«No reclamo el crédito, pero creo que el Espíritu me llevó a hablar con los misioneros de FSE en Nigeria. Después de que las hermanas terminaron su mandato, vinieron a despedirme y les dije: ¿Cómo pueden irse? ¿Cuál es el legado que dejáis?» Y preguntaron: «¿Quieres decir que deberíamos formar hermanas?» Y yo respondí: «¡Sí, por supuesto!». Dijeron: «No estaba en nuestro mandato, venimos a dirigir una institución y lo hemos hecho durante muchos años». En consecuencia y por su persistencia, tras reflexión y discernimiento, se accedió a la solicitud. «Las nigerianas recién formadas han empezado a crecer en número, en celo apostólico y pastoral» había declarado posteriormente el obispo Adelakun.
Monseñor Adelakun, que trabajó con tanto celo para cuidar el rebaño de la diócesis de Oyo, se retiró el 4 de noviembre de 2009. Luego pasó sus últimos años en la tierra en una profunda oración, trabajando con su capacidad de traer alegría y sonrisa a los rostros de tantas personas con las que entraba en contacto. Un ejemplo: ha creado una fundación conocida como «Fundación del obispo Adelakun» para cuidar a los menos privilegiados. También era conocido por brindar ardiente apoyo moral a los sacerdotes, religiosos y otras personas que se reunían con él. Ha tocado tantas vidas y atraído a tanta gente más cerca de Dios a través de los sacramentos de la Iglesia, en particular el de la Santa Eucaristía «Pan de vida eterna» del que se enamoró cada vez más!…
Después de muchos años de servicio a Dios y a la humanidad, el obispo Adelakun se retiró, pero nunca se cansó de la oración y las enseñanzas de la Iglesia. Respondió a la llamada de su Creador el 24 de octubre de 2025.
Fue llevado en su descanso, el 28 de noviembre de 2025, durante una ceremonia fúnebre en la iglesia Saint-Bernadine de Owode-Oyo, ceremonia seguida por un buen número de obispos a través de la nación, sacerdotes, religiosos entre los cuales nosotros mismos las Hijas del Espíritu Santo… y de los fieles laicos.
En su homilía, el obispo católico de la diócesis de Osogbo, John Oyejola, describió al obispo Adelakun como un constructor y pastor comprometido. Era conocido por sus notables actitudes de humildad, compasión y altruismo. Su lema era «fe y cultura».
El predicador de la ceremonia oró para que las palabras que Jesús dijo en el Evangelio de Mateo fueran dirigidas al obispo Adelakun: «Ven a mí, bendito de mi Padre, hereda el Reino preparado para ti desde la fundación del mundo.» Mt 25, 31-46. Concluyó confiando su alma en las manos de la bienaventurada Virgen María. El obispo fue enterrado en la capilla de la catedral de Nuestra Señora de la Asunción, Asogo Oyo.
Fue una ceremonia gloriosa!
Por Hermana Patience EFFIONG, HES. Publicado el 4 de diciembre de 2025
