Reunidas por un mismo Espíritu

Del viernes 5 al lunes 8 de septiembre de 2025, en Diébougou, Burkina Faso, «Reunidas por un mismo Espíritu», vivimos con mucho entusiasmo y esperanza nuestra asamblea de principios de año. Todas las hermanas respondieron favorablemente a este encuentro habitual.

En la capilla, mediante una oración participativa, la viceprovincial, sor Silvie ROAMBA, y sus consejeras nos introdujeron en este encuentro. A continuación, en la sala, en su discurso de apertura, Silvie dio la bienvenida a la hermana Pascaline SOMDA, que regresaba de tres años de misión en Camerún, a las dos nuevas hermanas Edith ZEMDE y Nina SOME y a la hermana Judith MBOUNGHOUL, consejera general.

Esta asamblea fue precedida, la noche del viernes 5 de septiembre, por una velada recreativa. Fue un momento de relajación, risas, carcajadas, diversión y alegría compartida entre nosotras con bailes y disfraces.

Nuestra primera reflexión fue una lectura del balance de las comunidades para ver cómo hemos vivido concretamente la orientación del año pastoral 2024-2025. A continuación, nos comprometimos a reflexionar para construir la orientación del nuevo año pastoral, formulada así: «Hijas del Espíritu Santo en Burkina Faso, unidas a aquellas con las que Dios nos ha asociado, siguiendo el ejemplo de nuestras primeras hermanas, arraiguémonos más en la vida espiritual. Mantengamos una actitud de formación permanente y ayudémonos mutuamente a crecer más en humildad, dulzura y sencillez».

Continuamos nuestros intercambios con el proceso de reflexión sinodal con vistas a la renovación del equipo de gobierno. La hermana Judith MBOUNGHOUL nos habló sobre este tema y también abordamos las directrices del Protocolo contra el abuso de menores y personas vulnerables.

Durante dos días vivimos el proceso de discernimiento en cuatro etapas: el tiempo de oración personal, la reflexión en grupo, la puesta en común y la libre expresión. Este tiempo de intercambio fue para nosotras, en la viceprovincia, una oportunidad para tomar conciencia de nuestras fortalezas, nuestras oportunidades, nuestras limitaciones y para llegar juntas a nombrar nuestras necesidades. Es una experiencia que nos ha permitido vivir intensamente momentos de oración, reflexión, discernimiento personal y en grupo para dejarnos guiar por el Espíritu Santo y ser más dóciles a su voz.

A continuación, la asamblea concluyó de forma oficial. Nos invade un espíritu de esperanza en un futuro mejor, teniendo en cuenta nuestras fortalezas, oportunidades y, sobre todo, la conciencia de nuestras limitaciones y los retos que debemos afrontar.

Hermana Delphine SOME y hermana Pascaline SOMDA. Publicado el 21 de septiembre de 2025.